Entendemos por medio ambiente al espacio en el cual el ser humano interactúa con la naturaleza. El medio ambiente es todo aquello que nos rodea, usualmente lo relacionamos con la naturaleza pero también podríamos decir que el medio ambiente puede ser el espacio creado artificialmente por el ser humano, como lo es un gran centro urbano.
La importancia del medio ambiente ha sido más relevante, debido a que el abuso que el ser humano genera ha sido más perceptible a través de los fenómenos naturales. Además, la provocación de alteraciones al medio ambiente afectan no sólo a otros seres vivos sino también al mismo ser humano.
Las asociaciones internacionales sobre el cambio climático han puesto de manifiesto una verdad indiscutible: NUESTRO MUNDO SE ENCUENTRA AMENAZADO.
Actualmente, los datos que manifiestan el deterioro del planeta son claros y rotundos. Por este motivo, debemos pasar a la acción para proteger de manera eficaz el espacio en el que cohabitamos.
El ser humano mantiene una constante interacción con el medio ambiente ya que es de él de donde obtiene todos los recursos para su existencia y conservación. Sin embargo, el crecimiento desmedido de la población y el aumento con ella de las necesidades de alimentos y otros tipos de recursos, ha llevado al ser humano a generar severos daños en el medio ambiente planetario, como el agotamiento de recursos no renovables, la contaminación de cursos de agua o del aire, la generación de gases del famoso efecto invernadero, entre otros.
¿QUÉ PODEMOS HACER?
Se puede pensar que no se logre hacer nada o casi nada para cuidar el entorno. En realidad, sí podemos hacer muchas cosas, les proponemos las siguientes:
– No tirar colillas, pueden desencadenar incendios.
– Cuando vamos de excursión al campo deberíamos recoger la basura que eliminamos, ya que los restos de basura se acumulan en el suelo y se convierten en sustancias contaminantes.
– El agua es un bien escaso e imprescindible, por lo que está en nuestras manos consumir la cantidad de agua estrictamente necesaria.
– Una parte de lo que consumimos acaba en la basura, y muchos elementos que tiramos se pueden volver a reutilizar si se emplean las normas de reciclaje.
– Los excrementos de las mascotas deben recogerse y eliminarse pues son potencialmente peligrosos para el medio ambiente, y pueden llegar a contaminar el agua.
– La conducción de vehículos de gasolina provoca emisiones de dióxido de nitrógeno, una sustancia que contamina el medio ambiente. Por este motivo, todo ciudadano responsable debería recurrir a otros medios de transporte no contaminantes.
– Recoger siempre las bolsas de plástico que utilizamos a diario. Estas acaban en las aguas del planeta, allí se fotodegradan con el paso del tiempo y se descomponen en petro-polimeros contaminantes para los peces y las aves.
– Los aparatos electrónicos que no estemos utilizando deberían apagarse, ya que de lo contrario se consume energía de manera innecesaria. En este sentido, en lugar de utilizar secadoras podríamos secar la ropa al aire libre.
– El consumo de alimentos orgánicos reduce el uso de fertilizantes y pesticidas.
Nunca debemos olvidar que nuestras actuaciones individuales y colectivas tienen un impacto sobre el ecosistema en el que vivimos. La importancia del medio ambiente radica en el hecho de que todas las formas de vida toman lugar en él y no en otro lugar, por lo cual su cuidado y preservación debería ser uno de los elementos primordiales de la acción humana.
Promefar Distribuciones S.A.S se encuentra comprometida en la promoción y prevención de las enfermedades. Es nuestro deber compartir información importante para la población.